martes, 17 de noviembre de 2009

El día 1-1-1-1

Querida hijita,

Hoy, sin querer, me di cuenta que es un día curioso para ti. A través de un contador que puse en el blog -y del que no sé si para cuando leas esta carta aún estará- me percaté que hoy, 17 de diciembre, tienes 1 año, 1 mes, 1 semana y 1 día de nacida.

Bueno, no es que sea una cosa trascendente, pero me pareció curiosa.

Esta última semana le diste por primera vez un beso a tu mamita. Siempre ella te decía "dame un beso" y te acercaba a su mejilla, y tú abrías la boca y le dabas el beso más húmedo y más cariñoso del mundo. Pero esta vez estiraste un poco los labios y le diste un besito que la emocionó y de paso me alegró, porque a pesar que fue "papá" tu primera palabra, y yo estaba feliz por eso, quería que hicieras alguna cosa nueva sólo para ella.

Pero no fue lo único con lo que nos sorprendiste estos últimos días. Al mismo tiempo que estás dando tus primeros pasos, te ha dado también por gatear. Y hace dos o tres días, cuando estabas jugando junto al comedor, en un ambiente que hemos acondicionado para ti con pisos de colores y juguetes, gateaste hasta una silla, te agarraste de ella (tu mamita se percató y agarró el respaldar para que no se te fuera encima), te arrodillaste y, mirando hacia arriba, te impulsaste y te paraste... ¡sola! ya antes lo habías hecho en la cama encaramándote en tu mamita o en mí, pero era la primera vez que lo hacías con un objeto en la sala.

Ya empezó, por tanto, nuestra etapa de cuidarte de todos los peligros. Hemos comenzado a tapar los tomacorrientes y a colocar temporalmente en las columnas que sobresalen de la pared los pisos de colores, que son blandos, para que si te golpeas contra ellas no te hagas daño. ¿Qué será de nosotros cuando empieces a caminar sola y a correr? no voy a poder acolchar el mundo entero, así que sólo me quedará rezar para que cada caída no te haga mucho daño y que te sirva para aprender cómo hacer las cosas mejor y cómo levantarte más rápido.

Hoy tus abuelitos Amanda y Manolo ya no están en la casa en la que vivimos desde hace muchos años. Se han mudado a otra zona, a un departamento, con miras a lo que se viene dentro de poco: tu tío Christian ya planea casarse con tu tía Tatiana, así que quedarán en casa sólo ellos y tu tío Roberto (que, a todo esto, bromea diciendo que dentro de algunos años le vas a presentar a tus amigas para ir a discotecas). Por tanto, la siguiente vez que los visitemos será en un ambiente totalmente nuevo, incluso para mí, que no conozco el lugar.

La de hoy será una carta chiquita. Por ahí me dijeron que es mejor escribir poquito frecuentemente que muy largo raramente, así que intentaré -de nuevo- contarte más cosas más seguido.

Te quiero mucho, hijita de mi corazón.

Tu papá.
Tags Blogalaxia:

No hay comentarios: